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martes, 27 de marzo de 2018

Entrar a Guyana no es facil....



Aterricé en Manaos y Paulo me estaba esperando y me llevo al hotel, como la otra vez ya había sacado a Libertad del estacionamiento y la tenia en el lavadero de autos de Ricardo ya lavadita y pronta para hacerle servicio completo.
Pero arranque ha sido de los mas difíciles, porque llegue y la camioneta estaba fallando por varias partes, primero tenía un freno que quedaba frenando y se estaba calentando, estaba con poca fuerza y de a ratos no entraban los cambios. Aparte de que, a pesar de haberla tapada con una lona, me entro agua por la puerta de atrás y tenía media camioneta mojada. Además, para prevenir mayores problemas le mande a re balancear el cardan porque estaba vibrando mucho entre 30 y 50 kms/hora.
Por suerte Eduardo el amigo de Paulo se puso a arreglarla enseguida, sangramos el freno del acompañante que era el que estaba trancado y aflojo, yo me di cuenta de que la falta de fuerza era porque había un cable de bujía suelto y el problema de los cambios era que el nivel de aceite de transmisión estaba bajo. Y tras 3 días en Manaos con las puertas abiertas se seco casi todo lo que estaba mojado quedaron unas maderas mojadas, pero se estaban secando rápido.
Los días en Manaos se me fueron rapidísimo ya que en el taller cada 5 minutos de trabajo paraban a hacer alguna pelotudez y yo a la vuelta todo el día para ver si salía medio rápido. Muy simpático Eduardo, pero hay veces que se demora un día entero en hacer un arreglito fácil porque se las pisa monumentalmente, un día pasamos 3 horas para comprar un pez para el almuerzo porque se reusaba a pagar mas de 50 reales por un Tambaqui grande, pero de tantas vueltas que dimos nos quedamos sin nafta y perdimos 1 hora esperando a que nos trajeran nafta y después terminamos pagando 45 por un Tambaqui más chico, pero gastamos como 10 reales en nafta y 3 horas en esas vueltas. Cuando llegamos al taller mientras lo asaban trabajo un ratito, pero después paramos a comer y al ratito llego otro cliente al taller que trajo carne y asaron y comieron de nuevo así que otras 2 horas en esas vueltas. Por suerte las que hizo eran fácil y logre salir en 3 días.
También durante esos 3 días le hice un cambio de aceite y le cambié los limpia parabrisas que ya estaban que no daban más. Y un amigo de Eduardo que es electro mecánico me arreglo le tanque de agua para los limpia parabrisas que no me andaba porque tenía el cano tapado.
Saliendo de Manaos, por suerte y gracias a que Paulo es una gran persona y me acompañó hasta la salida de Manaos para que no me perdiera, se me rompió uno de los limpia parabrisas, lo que paso es que el plástico donde articula uno de los brazos estaba tan reseco que se partió, yo me imagino que llevaba 30 años ahí así que no me puedo quejar, tras 20 minutos luchando con los limpia parabrisas logramos sacarlos con Paulo y nos fuimos hasta el taller donde Evento agarro unas herramientas y un poco de alambre y se vino con nosotros a hacer “gatilho” o sea un remiendo con alambre jijiji. Nos llevó como 3 horas, pero logramos dejar todo funcional y yo seguí viaje para Presidente Figueredo en donde la idea era pasar la tarde, pero como llegue de noche caí derecho al hotel y a dormir.
A la mañana siguiente nuevamente note el problema con el freno del lado del acompañante y en una gomería le dieron otra sangrada al sistema y pareció funcionar. Digo pareció porque se podrán imaginar que no funciono porque cada vez que frenaba el freno quedaba pegado hasta que después de unos cuantos metros se despegaba, por suerte desde Presidente Figueredo hasta Boa Vista que era mi próximo destino es ruta derechita y sin mucho pueblo así que solo frene unas pocas veces, pero en Boa Vista con el trafico y las intersecciones en las que tuve que parar para llegar a lo de Cicero la rueda llego echando humo. Así que al otro día marche para lo de Airton, que si bien es lento como Eduardo por lo menos sabia que hacia un buen trabajo y prolijo. Resulto que el problema era que el tubo del liquido de freno estaba tan oxidado que no dejaba volver el liquido y por eso quedaba frenada la rueda, pero el mayor problema fue que la pastilla se acabo en el viaje de tanto rozar y ahí en Boa Vista no había, otra vez a comprar partes a Venezuela…. Por suerte esta vez solo se demoraron 3 días en llegar las partes y uno mas en mandar a hacer un tubo de freno nuevo y como siempre Cicero me alojo en su casa. Esos días aproveche y lave todo lo de la camioneta porque Cicero se mudo a una casa con un patio enorme y con cuerda para secar la ropa así que lave como 10 cargas de lavarropa. También hice los tramites frente a la embajada de Guyana para entrar la camioneta y hasta invente una receta de torta de acai que me quedo riquísima. Lastima que en el único lugar donde consigo jugo concentrado de acai es en Brasil jijiji.
Esta vez por lo menos tuve suerte con los días y me dio para salir de Boa Vista un viernes porque para entrar a Guyana con la camioneta tenia que comprar el seguro contra terceros, pero la oficina de la aseguradora solo abre de lunes a viernes de 9 a 4 así que si quieres entrar un fin de semana te jodes porque no te dan el permiso para el vehículo sin el seguro.

Y ahora si señoras y señores la tan esperada y demorada visita a las Guyana, tierras más desconocida por mí que el resto de América y que desde hace ya un tiempo me tenia con mucha curiosidad. Cruzar el puente que separa Bomfin de Lethem ya es un momento crucial porque pasas de manejar por la derecha a manejar por la izquierda, dejas de hablar portugués para hablar Ingles y dejas las buenas rutas por algo que le dicen ruta pero que es un rompe auto nomas.
En inmigraciones me demoraron 1 hora porque no estaban seguros de si podía entrar sin visa, se ve que no ven muchos pasaportes uruguayos. En aduana tuve que pasar 2 veces porque la primera vez me miraban y me dijeron que siguiera y eso que les pregunte para ingresar la camioneta y yo pensé que tenia que ir a otra ventanilla pero no, cuando quise acordar estaba afuera del edificio y sin los papeles jijiji, al segundo intento por fin me entendieron y me mandaron para el banco a comprar el seguro, el banco esta en el pueblo que esta como a 5 kms, llegue al banco y el cajero no me daba plata y me querían matar con el tipo de cambio por suerte probé otra tarjeta y le cajero me largo plata. Compré el seguro y volví a la frontera, mismo en el pueblo las calles asfaltadas estaban tan malas que era mejor ir por la banquina. Yo no me quería imaginar lo que sería la ruta a Georgetown... Pero en aduanas no terminaron el papel, me mandaron de nuevo al pueblo o sea otros 5 kms para que alguien me firmar el permiso que solo era por 3 días y que si quería lo podía extender en Georgetown.  Como siempre se me fueron varias horas en cruzar la frontera por todos los tramites y papeleos al pedo que hay que hacer, pero ya estaba listo para seguir el viaje. 


Cruzando el puente en la frontera Brasil - Guyana, ya manejando por la izquierda

Puesto fronterizo de Lethem



Quede en un hotel y me dormí temprano porque quería salir tempranito para la ruta por si estaba muy fea tener tiempo de llegar antes de que cerrara el ferry que hay a mitad de camino que trabaja de 6 a 6, el plan era llegar al ferri y dependiendo de la hora a la que llegara quedarme ahí o seguir hasta el próximo punto civilizado.
Los primeros 100 kms de la ruta fueron los mas sufridos para Libertad, fueron 4 horas de serruchitos casi ininterrumpidos que digo serruchitos, eran sierras enteras. Increíble lo grande que estaban y como abarcaban toda la ruta, no había como esquivarlos, yo rezando todo el camino porque no se aflora algo y rompiera la camioneta por la mitad de la ruta. Por suerte Libertad se la re banco y llegando a Annai que es un puesto de control donde tenes que mostrar el permiso del vehículo a unos policías, la ruta mejoro y ya pude andar a 40 y hasta 50 kms/h que después de 4 horas a 25 de promedio me parecía que iba rapidísimo jijijiji. El resto del camino hasta el ferri fue bastante bueno por lo que llegue al ferri a la 1 de la tarde. Otro punto de control de aduanas y de policía y embarque. Cruce yo solo en el ferri y pregunté cuanto se demoraba hasta el siguiente punto donde se podía dormir que es Mabura, me dijeron 3 a 4 horas así que decidí seguir para tener un día más corto al día siguiente y llegar a Georgetown mas descansado. Eran unos 100 kms mas y pensé para mí, aunque me demore 4 horas y llegue casi de noche voy a andar bien.




Ni bien sali de Lethem, la ruta estaba en malas condiciones, serruchitos por todos lados y sin descanso para Libertad


Por lo menos los puentes estan nuevos y en buenas condiciones


100 kms de esto no es facil, promedio de velocidad fue 25 kms/h

Para que vean lo que fueron esas primeras 4 horas en la ruta


Solo cuando salia de la ruta tenia un poco de descanso pero no mucho



Cuando entre a la zona de mas vegetacion after Annai, la ruta mejoro bastante



Estas marcas me mostraron lo que seria esta ruta en epoca de lluvias, menos mal que espere a la epoca seca sino no se si pasaba






Cruce del ferri, de Lethem a Georgetown es gratis pero si venis bajando tenes que pagar en Georgetown o eso me dijeron.

Aun en epoca seca algo llueve y los pozos se llenan enseguida de agua.

Quien me iba a decir que ese pozo me iba a complicar y costar lo que me costo. Pero si ahi fue donde me entro agua al motor y por eso me quede 24 horas con la camioneta parada en la jungla.


 Pero el optimismo me duro poco cuando 26 kms y una hora más tarde me encontré con un pozo lleno de agua que me cambio el viaje, resulta que a pesar de que estamos en época seca siempre llueve y este charquito estaba más profundo de lo que parecía y casi me tapa el capo, lo pase bien pero a los 20 metros se me apago la camioneta, le di un ratito para que escurriera el agua que había mojado el radiador y el motor y después de varios intentos de arrancarla salimos de nuevo pero 200 metros mas adelante se me quedo y ahí si no quiso arrancar más.  Con mis limitados conocimientos de mecánica intente ver si podía solucionar el problema y ahí descubrí el craso error que había cometido, si bien el agua no había tapado el motor cuando cruce el charco le dio para llegar a la altura de la toma de aire del motor por lo que me lleno de agua el filtro de aire y de ahí fue derecho al motor por eso se me apago. Gracias a dios y a todos los ángeles que me cuidan en el camino a los 5 minutos de estar parado en la mitad de la jungla sin señal de teléfono ni idea de que iba a hacer, paso un camionero que paro y me dio una mano enorme y también me complico la vida al mismo tiempo jijiji. Ahora es cuando les cuento de que a pesar de que en Guyana la gente habla inglés, no hablan un ingles que yo entienda muy bien jijiji, hablan inglés creole que es una mezcla de idiomas y con un acento muy cruzado que me cuesta pila entender, por suerte ellos a mi si me entienden. Ahí le explique a Rhabi y a Moses lo que había pasado y enseguida pusieron manos a la obra. Cambiaron los cables de las bujías para que el motor hiciera contra explosión por si había entrado agua a los pistones, pero nada, le limpio el distribuidor por las dudas y nada. A estas alturas mi batería estaba un poco baja así que le pusimos los cables de arranque a la batería de ellos y le dimos arranque hasta que el motor de arranque decidió que había trabajado mucho y ahí mismo quede en la mitad de la jungla con la camioneta que no arrancaba y con el motor de arranque fundido. Por eso es que me dio una mano enorme pero también me complico la vida.
A esas alturas eran casi las 4 de la tarde y él quería cruzar el ferri antes de las 6 para seguir su viaje. Mis opciones eran esperar un milagro con la camioneta o irme con Rhabi y Moses en el camión hasta le ferri donde había señal de teléfono ver si conseguíamos un mecánico que viniera a rescatarme y esperar a que nadie me robara o se estrellara contra la camioneta. Lo lógico era hacer lo segundo y eso fue lo que hice, agarre la computadora, el pasaporte y una muda de ropa, tranque todo y me fui esperando lo mejor.
Llegando al ferri Rhabi llamo a un amigo mecánico le conto lo que había pasado y este amigo le dijo que por 80.000 dólares iba a ayudarme y que traía con que arreglar el motor de arranque. El tipo de cambio es 200 a 1 así que eso eran US$400 pero considerando que el tipo tenía que venir desde Georgetown en esa ruta tan fea y que se tenia fe para sacarme andando y hasta me traía 4 litros de aceite para hacer un cambio de aceite porque sino tampoco salía. Le dije a Rhabi que era el que estaba hablando por teléfono porque yo por teléfono no le iba a entender un carajo al mecánico si apenas le entendí a Rhabi en persona. El detalle fue que Amad, el mecánico, estaba en la otra punta del país y no podía venir hasta el día siguiente a la tarde. Intentamos llamar a una Grúa para por lo menos llegar a la civilización y no conseguimos porque la grúa que Rhabi conocía era muy chica para la camioneta. Así que le dije adiós a Rhabi que me dejo el numero de Amad y pague una noche de hotel. Esa noche hablando con la gente me dijeron que si había trancado las puertas no iba a tener problemas que me quedara tranquilo. Pero esa noche casi no dormí porque estaba nervioso pensando que iba a hacer si Amad no venia o si la camioneta iba a estar en una pieza porque lo que me contaron en el hotel es que las camionetas de transporte que vienen de Georgetown para Lethem salen a las 5 de la tarde de Georgetown para llegar tipo 1 o 2 AM al ferry donde le hacen de comer y esperan para ser los primeros en cruzar en el ferri a las 6 y eso significaba que iban a pasar por donde estaba la camioneta a las 12 y si bien la camioneta estaba a un lado de la ruta y en una recta, no tenia idea si los de las camionetas de transporte iban a tener buenas luces y como la ruta esta tan mal nadie va por su senda sino por donde pinta menos peor. Y para colmo de males como si los nervios no fueran poco a la 1 cuando llego la primera camioneta prendieron la música en el hotel y la gente meta conversar cerca de mi habitación así que si dormí 3 horas fue mucho. Aparte que no pude cenar porque la comida que tenían era muy picante y me sonaban las tripas del hambre jijiji.
A las 5 am ya no me aguante mas en la cama y me levante, espere hasta las 6 am conversando con los del hotel que todavía estaba levantados después de haber pasado la noche entera atendiendo gente y les pedí si no llamaban a Amad por mi para preguntarle si iba a venir y a que hora llegaba. Por suerte que lo llame porque dijo que estaba esperando el llamado para ver si salía o no porque no quería hacer el viaje si yo ya había conseguido quien me ayudara. Le prometí que lo esperaba y me dijo que a las 9 salía de Georgetown porque tenía que esperar a que abrieran las tiendas para comprar el aceite.
A las 10 am, no me aguante mas y lo llame de nuevo a Amad para ver si realmente había salido, los guyaneses son conocidos por su impuntualidad y su informalidad, nuevamente las chicas del hotel llamaron y Amad dijo que venia por Linden, que es donde termina el asalto bajando desde Georgetown y comienza la parte fea que calculaba que a las 2 o 3 pm llegaba donde estaba la camioneta. Que llamaba de nuevo cuando estuviera en “58 Mile” que es una estación de servicio y hotel donde hay señal de teléfono. A mi me recomendaron agarrar viaje para la camioneta con alguien que pasara por si cuando el llamara no conseguía viaje enseguida y después nos desencontrábamos. En eso llegaron unos camioneros que venían caminando y me dijeron que estaban del otro lado del rio con camiones cargados de madera, pero el nivel de rio estaba muy bajo para ese peso y que les habían dicho que se podía demorar hasta 1 mes en que comenzara la época de lluvia para que subiera el nivel y venían a ver que pasaba por este lado y a esperar a que el jefe los llamara para decirles que tenían que hacer. Hablando con ellos esperando a ver si pasaba alguien rumbo a Georgetown me dijeron que venían un amigo de ellos cargando un buldócer en un tráiler y que le iban a pedir que me llevaran. A la media hora llego el amigo y paro a comer, le preguntaron si me llevaban y dijeron que si porque iba una camioneta de apoyo y el camión cargado con el buldócer. Me fui en la camioneta con Surish, quien resulto ser otra gran persona que me dijo que no me arreglaba la camioneta porque así no complicaba al otro mecánico porque él era mecánico también y que había venido a arreglar el camión que cargaba el buldócer y se había quedado porque el chofer estaba en entrenamiento así que lo acompañaba por las dudas. Llegamos a la camioneta y ahí respire la camioneta estaba bien y no había ningún vidrio roto o señal de entrada forzada, Surish y el camionero se quedaron como una hora conversando conmigo, bueno intentando conversar porque la verdad que el acento me cuesta un montón. Pero ahí nos hicimos entender entre los dos y pasamos un lindo rato.
A eso de las 12 y poco me dejaron solo y comenzó la espera la mas larga que he tenido en mucho tiempo. Solo en la mitad de la jungla, sin teléfono para llamar a nadie, con poquísimo trafico pasando por el lugar y esperando a que un mecánico que no conocía y con el que a esas alturas nunca había hablado llegara a ver si podía arreglar la camioneta en la mitad de la jungla sino íbamos a tener que bajar el motor de arranque manejar a Georgetown y volver a colocarlo que no solo implicaba mas costos, sino que implicaba otra noche de la camioneta en la mitad de la nada. Para las 2 de la tarde yo estaba tranquilo me habían dicho que no iban a llegar hasta las 2 o las 3, no había pasado ni un solo auto en ningún sentido pero ese rato se me paso mas o menos rápido, de 2 a 3 pasaron 2 camionetas y las dos me preguntaros si estaba bien, si precisaba agua o comida y si quería que me llevaran a algún lado, confiando en Amad lo deje pasar pero cuando se dieron las 4 de la tarde y no paso nadie más ni había señales de Amad me entre a preocupar, además que a eso de las 3:20 de la tarde de la nada escuche un rugido ensordecedor que la verdad me hizo saltar del cagazo, en todo el rato que había estado en la ruta no había escuchado mas que los pajaritos y algún insecto y de repente cerquita mío ese rugido que de primer momento me sonó a tigre o león, por suerte antes de que se me aflojaran los esfínteres jijiji reconocí el rugido como el de un mono aullador y como el rugido seguía me quede tranquilo pero el julepe sí que fue grande.
Pasadas las 4 de la tarde había decidido que si alguien pasaba rumbo al ferri iba a agarrar viaje si podía y le dejaba una nota a Amad porque me parecía mas seguro dormir en el hotel de nuevo que en la camioneta si fuera necesario. Gracias a dios Amad apareció a las 4 30, llego con 2 ayudantes y se pusieron manos a la obra enseguida, me contaron que habían parado en el camino a ayudar a una camioneta por eso se habían demorado.
Trabajaron de forma eficiente y organizada no me puedo quejar por eso, pero si me demostraron que la parte ecológica en Guyana no es algo que les preocupe mucho porque el cambio de aceite lo hicieron tirando el aceite en la ruta sin mayores problemas y el filtro salió volando para adentro de la selva. Una vez que vaciaron el aceite movimos la camioneta para atrás un poco para no trabajar en el aceite y siguieron con el resto, sacaron todas las bujías y las limpiaron todas y también bajaron el motor de arranque que era mi mayor preocupación porque no se me ocurría como iba a saber que partes traer para arreglarlo. En eso Amad le pidió a Alex que prendiera fuego, yo me imagine que era para hacer humo para ahuyentar los mosquitos porque ya estaba bajando el sol pero resulto que el fuego era para arreglar el motor de arranque, y por suerte no era para prenderlo fuego y poner otro jijiji, Amad me explico y para los que saben de mecánica será muy obvio, que al darle tanto arranque a la camioneta el motor de arranque se recalienta porque no está hecho para girar tanto, y como mecanismo de seguridad lo que pasa que se recalienta es que el estaño que cubre las conexiones de los diferentes cables se derrite pero que el iba a reconstruir los puentes de estaño y con eso debería solucionarse el problema, y como no tenia un generador para hacer funcionar el soldador de estaño iba a usar uno que ponía sobre el fuego.
Axel limpiando las bujias


Amad probando el motor de arranque sin resultados..

Alex y Amad reviviendo a Libertad



 Amad reconstruyendo el motor de arranque con su soldador de estano a lena

Le llevo como 1 hora de calentar el soldador y hacer unos cuantos puentes para poner el soldador en el fuego pero le quedo super prolijo, lo armo todo de nuevo y no funciono… Pero no se desalentó, lo volvió a desarmar y se dio cuenta de que había un falso contacto lo arreglo y ahora si teníamos motor de arranque. A estas alturas ya habían limpiado las bujías, pero no las habían colocado porque querían cerciorase que no había agua en los pistones, así que colocaron el motor de arranque y le dieron arranque y ahí aprendí otra cosa, si no hay bujías no hay compresión así que el motor no arranca porque yo estaba preocupado que me iban a fundir la camioneta dándole arranque sin aceite. Yo creo que aprendí más de mecánica en a la jungla que en muchos talleres jijiji. Por suerte no había entrado agua a los pistones y ya se pusieron a armar todo, de nuevo para las 7 de la noche estaba la camioneta pronta. Ya era noche cerrada y teníamos el fuego prendido porque Amad tenia miedo de que algún puma o pantera nos pudiera atacar y me dijo que quería manejar hasta Mabura para pasar la noche ahí porque no le simpatizaba la idea de pasar la noche en un lugar tan desolado, además que quería llegar temprano a Georgetown para trabajar el día siguiente. Como íbamos en grupo me anime a seguir de noche porque no me gusta manejar de noche. Igualmente, como ya la había avisado que no tenia plata para pagarle me había asegurado que me siguiera hasta la salida de la ruta por si algo mas me pasaba jijiji.
Salimos Rumbo a Mabura, pero a los 2 o 3 kms pare de nuevo porque el freno del lado del chofer estaba haciendo un ruido muy fuerte, ahí mismo le sacamos la rueda y le enderezaron el resorte que mantiene la mordaza apretada que estaba todo torcido de tanto serrucho y pozo. Seguimos avanzando lentamente porque la ruta estaba bien fea, este tramo fueron de pozos gigantes lo cual te hace ir lento, pero por lo menos no te afloja todo, los próximos 100 kms me llevaron 4 horas y encima cuando llegamos a Mabura estaba todo cerrado menos el puesto de policía donde marque tarjeta como corresponde y Amad me dijo que siguiéramos hasta “58 mile” que es el próximo puesto donde hay donde parar porque estaban con hambre y ahí no íbamos a conseguir nada. Por suerte desde Mabura hasta 58 mile la ruta estaba en bastante buenas condiciones mayormente era de arena roja y estaba bastante pareja, de vez en cuando aparecía un pozo gigante así que había que ir con cuidado. Terminamos llegando a 58 mile a las 12 de la noche, yo estaba liquidado de cansado porque casi no había dormido la noche anterior y la manejada en esas rutas destrozadas de noche es cansadora por lo menos le escapamos al calor. En la estación de servicio compramos comida que comí a medias porque estaba picante que no podía mas lo cual no me esperaba porque pedimos “chop suey” que es comida china, y lo que me dieron fueron fideos chinos con 2 vegetales locos y mucho picante y 2 pedazos de pollo frito que a pesar de que tenían pimienta me los comí porque estaba muerto de hambre. Ahí me fui a acostar y me dijeron que salimos a las 5 am al día siguiente que el resto de la ruta estaba en buen estado.
Por suerte me dejaron dormir hasta las 6 porque estaba muerto, salimos enseguida he hicimos los últimos 120 kms de ruta, nos demoramos 2 horas en hacer 110 kms que estaban como la ruta de Mabura a 58 mile y los últimos 10 kms antes de llegar a Linden y de dejar la ruta de tierra atrás nos demoramos 1 hora mas porque estaban desastrosos creo que fueron los 10 kms más destrozados en toda la ruta  a pesar de ser los 10 kms más cercanos a una ciudad grande que te imaginas tendría la maquinaria para mantenerlos en mejor estado. 


Un nuevo dia, ya en la mejor parte de la ruta avanzando rumbo  a Georgetown


Fruta Pork Fat (grasa de cerdo)


Los ultimos kms de este reto que es la ruta Lethem Georgetown, pero antes de la peor parte que son los 10 kms antes de Linden



Esa mañana Alex y Axel los ayudantes se turnaron en acompañarme para que no me aburriera de manejar solo y la mayor parte del camino la hice yo adelante esperando cada tantos kms para ver si me venían siguiendo el ritmo porque con tanta tierra que volaba se quedaban rezagados, en un punto de la ruta antes de llegar a Linden siento que me saludan por mi nombre lo cual se podrán imaginar me causo mucha sorpresa y resulto ser Surish que estaba dándose un baño en un arroyito, pare a saludarlo y quedo muy contento de verme con la camioneta andando. En otro punto del camino paramos a cosechar una fruta que nunca había visto el nombre en ingles es Pork Fat, o sea grasa de cerdo porque la pulpa es blanca y sebosa como la grasa, no me gusto mucho el sabor, pero ellos se llevaron una bolsa llena para la casa jijijij. Y para rematar la mañana cuando por fin llegamos a Linden con Alex que me estaba acompañando paramos en una estación de servicio y esperamos y esperamos y no los veía venir como 20 minutos más tarde cuando me estaba preocupando los veo pasar y les toque bocina porque ellos no nos habían visto, pararon a comprar algo para comer en la estación de servicio y Amad me conto que habían pinchado y como no tenía gato había tenido que esperar a que pasara alguien a que les prestara un gato. Pero eso no fue todo, cuando íbamos a seguir viaje hasta Georgetown finalmente en el asfalto le di arranque a la camioneta y nada, el motor de arranque que ni se movía, por lo menos me había sacado de la ruta pero no sabia que hacer porque para conseguir un motor de arranque para la camioneta iba a estar bravo, por suerte Amad es un tipo que sabe y enseguida lo bajaron para ver que podía ser el problema, le dieron corriente y andaba así que el problema era eléctrico, uno de los cables que va de la batería al motor de arranque se había aflojado de tanta vibración y solo basto con apretarlo para prender la camioneta y manejar los últimos 100 kms hasta Georgetown, ese tramo lo hice guiado por Axel. Amad se fue más rápido porque quería llegar al taller y yo me fui tranquilo porque no se olviden que acá manejar por la izquierda y para pasar en la ruta es complicado por suerte la ruta es bastante recta y no había mucho tráfico, lo que si complica es que manejan igual o pero que en la costa de Colombia, pero como todo es al revés lo noto mas porque todos los cruces y las cosas son opuestas a lo que estoy acostumbrado. Pero despacito y concentrado llegamos bien.
Y así fue mi entrada no tan triunfal a Guayan, la próxima les cuento como me fue conociendo el resto del país.
Gracias por leer
Juan