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viernes, 28 de junio de 2019

Lavalleja




Desde Punta del Este hasta Solís de Mataojo son unos 85 kms, pero como le erre el viandazo en la rotonda de Pan de Azúcar porque pensé que tenía que entrar y me había pasado de la entrada tuve que seguir por la interbalnearia y volver para atrás y luego me di cuenta de que no tenia que entrar así que había manejado al pedo jijijiji, pero bueno en su mayoría la cartelería de las rutas Uruguayas están bien yo me perdí por despistado mas que nada.
A Solís llegue bien, tranquilo y sin complicaciones. Me encontré con Gabriel que lo había conocido en Ezquel cuando estuve en la Patagonia Argentina y me había invitado a su casa no se si pensó que yo iba a caer o no pero bueno ahí le aparecí jijijiji. Gabriel después de 7 meses viajando y trabajando se volvió porque extrañaba, pero ahora también extraña viajar, pero esta difícil para ahorrar y viajar estando en Uruguay.
Cuando uno piensa en Lavalleja piensa en las “Sierras de Minas” pero hay mucho mas para ver que representa al departamento, pero como todo en el Uruguay se pierde porque nadie le hace publicidad ni apoyo para desarrollar algo turístico. En Solís de Mataojo que es un pueblito de casi 4000 habitantes hay muchos paseos para hacer cerca del pueblo que valen la pena y que son muy lindos. También se puede ir por supuesto a Villa Serrana y al Salto del Penitente que están pasando la ciudad de Minas pero que no por ser mas conocidos son mejores.
Con Gabriel decidimos conocer algo local que es el Cerro Caperuza porque se puede ir en bici para no andar judeando a Libertad ya que esta baja de Batería y para hacer un poco de ejercicio. Salimos después del almuerzo, pero no llegamos muy lejos porque nos agarró un chaparrón que nos ensopo. Nos había dado el tiempo de conocer 2 parques que hay sobre el rio con mesas para picnic y algunos juegos, uno de estos parques lleva el nombre de una cara conocida por muchos que me imagino que como yo no muchos saben que es de Solís de Mataojo, hablo de Eduardo Fabini la cara del billete de U$100. Ese parque lo restauraron hace poco y también restauraron el viejo puente que antes era la salida del pueblo pero que hace muchos muchos anos se lo llevo una crecida y nada, hoy por hoy lo hicieron puente colgante y nada más, pero está muy prolijito todo.  También vimos la casa donde creció Fabini, pero como todo en Uruguay estaba abandonada y ahora hace unos años la ocupo una familia y ahora viven ahí y nadie dice nada…. De esta parte del paseo no hay registros fotográficos porque me olvide de llevar la cámara, tantos días viajando con Colleen me había acostumbrado a que ella iba sacando fotos y yo se las robaba luego jijijiji.
Al otro día que seguía amenazando con llover nos fuimos igual, pero esta vez ya mas preparados, lleve la cámara que es importante, pero también llevábamos agua y ponchos para la lluvia porque ese fue otro detalle que no consideramos el día anterior salimos a hacer 20 kms en bici sin agua jijijiji.
Como había llovido tanto el camino de balastro que estaba en buenas condiciones y sin mucho barro estaba blandito y se hacía pesado, también estoy yo pesado que no ayuda, así que los 10 kms de ida se hicieron largos y hasta nos toco bajarnos a caminar un par de repechitos jijijiji, pero al final llegamos al Cerro Caperuza. El Cerro Caperuza esta en las faldas de la cierra, es un cerrito pequeño pero lo interesante es la piedra en forma de caperuza que hay en la cima, que a su vez esta apoyado sobre otras grandes piedras que le da una vista muy linda. Desde la calle hasta el cerro se puede llegar caminando, previo salto de unos alambrados, son unos 10 minutos desde la calle a la piedra. Las vistas desde ahí son muy lindas y en un día de sol sería un lugar increíble para pasar la tarde porque hay sombra y una paz increíble. Teníamos ganas de seguir conociendo e ir a Aguas Blancas y al Pozo del Indio, pero se venía una tormenta eléctrica que no tenia cara de buenos amigos además que eso implicaba meter varios kms de mas y yo para ser honesto estaba un poco cansado, pero sobre todo tenia el tuje acalambrado del asiento de la bici jijijiji. Así que nos volvimos para el pueblo, tomamos otro camino para regresar que a mi me pareció mas firme o seria que porque era la vuelta y se hizo mas liviano pero lo importante es que llegamos bien, como broche de oro nos fuimos al cementerio porque de ahí se ve casi todo el pueblo y la iglesia con las sierras de fondo, en un día despejado la foto hubiera quedado para el Instagram jijijiji. Pero bueno igual es una linda vista. 


Cerro Caperuza

La Caperuza

Debajo de la Caperuza




Gabriel bajando del cerro




Iglesia de Solis de Mataojo


 El ultimo día íbamos a ir al Salto del Penitente, la gruta del padre Pio y Villa Serrana, pero amaneció lloviendo y no paro hasta la tarde así que no salimos porque 2 de los tres lugares implicaban caminatas y paseos al aire libre que no iba a estar bueno visitar. Así que el agua me corto varios paseos esos días y con el pronostico de mas aguas me fui para Canelones a Santa Lucia a visitar mas gente y seguir conociendo Uruguay, pero poniendo más y más cosas en la lista de lo que queda por conocer. 

 Gabriel, Yose, Chiquito y Diego

Gracias por leer
Juan

domingo, 23 de junio de 2019

Maldonado

Desde el Portal del Cabo hasta Punta del Este hay unos 120 kms pero por lo menos estaba la ruta en muy buenas condiciones y también ya sabía que la batería no me está cargando así que por lo menos no fui gastando la batería al pedo, un problema es que para no gastar batería andaba con las luces bajas apagadas que no esta bueno porque si me ve la caminera me van a parar o multar pero bueno la idea es conseguir el regulador pronto e instalarlo para no complicarme al pedo.
Pero al final termine usando las luces bajas porque acá obscurece muy rápido y muy temprano así que la última media hora que use la camioneta fui con las luces prendidas que fue entrando ya a San Carlos. En punta llegamos a la casa de Susana y Ricky que son los suegros de Paulina y que la verdad nos recibieron muy bien. La camioneta entro justita en el pasillo donde guardan ellos el auto, pero bueno lo importante es que entro. Y como no la íbamos a mover por unos días no importaba que casi no se podían abrir las puertas jijijiji.
Esa noche pasamos conversando con Ricky y Susana enfrente a la estufa y ya hicimos planes de lo que íbamos a hacer para el día siguiente. El plan era ir a la Isla de Lobos a conocer y luego visitar el centro de Punta del Este porque en realidad nosotros estábamos quedándonos en Maldonado.
Averiguamos en internet y los tours a la isla salen al medio día, pero cuando llegamos al puerto nos encontramos con que ese día no había salidas porque había mucho viento, nos pasaron los datos para llamar así no teníamos que ir hasta el puerto para preguntar para el día siguiente. Plan A quedo anulado por mal tiempo pero bueno teníamos el plan B, que también era el plan para el día siguiente que era ir a visitar Pan de Azúcar y Piriápolis, para no perder tiempo nos fuimos desde la Terminal de Punta del Este Hasta Pan de Azúcar y de ahí enganchamos un ómnibus que va desde la ciudad de Pan de Azúcar hasta Piriápolis, nos bajamos en la reserva para subir hasta la cruz pero ahí me enteré que como últimamente ha habido varias personas lastimadas o accidentadas los bomberos cierran el acceso al cerro cuando las condiciones son medio desfavorables y como esa noche había llovido un montón habían cerrado el acceso a la torre todo el día porque las piedras son muy resbalosas cuando están mojadas. Nunca me había pasado en toda mi vida de haber ido al Pan de Azúcar y no poder subir, pero bueno fue por una razón lógica. Como estábamos ahí igual recorrimos la parte de la reserva que esta mucho mas grande de lo que estaba la ultima vez que fui yo, hay un sector nuevo y dos mini paseos nuevos para mí, uno es el mirador donde esta la parte de la minería del granito que fue una de las primeras industrias de Piriápolis y también algo que le llaman el paso del tren que es un camino que va entre lo que yo creo fue sacado del cerro en la época de la minería. Lo que no estaba que siempre había estado antes es el serpentario porque creo que ahora esta en el parque La Cascada, pero bueno aun si la subida al cerro la visita a la reserva valió la pena, porque también creo que hay más animales que antes o al menos eso me pareció a mí que hacía como 3 o 4 años que no iba para ahí. 


Paseo del tren en Pan de Azucar, para mi un paseo nuevo que me gusto mucho





Casi todos los bichos estaban escondidos o en muy lejos en las jaulas que no pudimos sacarles muchas fotos, a no ser los coaties que estaban por todos lados jijiji


Desde la reserva nos fuimos hasta Piriápolis y fuimos caminando hasta el puerto y hasta la virgen de los pescadores porque no nos daba el día para llegar hasta arriba del Cerro San Antonio, igual desde la virgen hay una linda vista de la costa así que el día lo aprovechamos igual. 


Vista desde la Virgen de los Pescadores




Siempre me gusto mucho la rambla de Piriapolis, aunque casi nos volamos igual es linda


Nos volvimos a Maldonado y esa noche coordinamos para con Agustín y Quilia (el hijo de Silvia y su novia) para encontrarnos en la tarde siguiente porque para ellos dos que son estudiantes el viaje a la isla de lobos estaba un poco carito jijijiji, igual esa tarde hablando con Paulina me paso el dato de una empresa nueva que hace el tour y que cobra la mitad que las otras dos que tienen mas anos en el mercado pero aun así son US$30 por persona que no es poca plata para una excursión de 3 horas con suerte.
Nos levantamos temprano y llamamos a los de Oceanía a para preguntar si salían a la isla ese día, me pidieron los nombres y nos dijeron que fuéramos al puerto a las 11 30. Desayunamos tranquilos, Ricky y Susana nos llevaron hasta el puerto y nos quedamos esperando un ratito porque no había nadie en la caseta de Oceanía, cuando llegaron y fuimos a presentarnos que fue una hora después de haberles escrito por WhatsApp, me dicen que no salían ese día que solo fueron a avisarle a la gente que había reservado, o sea me toman la reserva una hora antes y luego ellos se toman la molestia de ir a avisarme que no hay salida cuando perfectamente me pudieron avisar por WhatsApp o directamente avisarme cuando pregunte que no salían porque había bandera roja y prefectura no los dejaba salir, por un momento me acorde de Galápagos y el mal servicio que dan los proveedores turísticos de atracciones que siempre tienen gente. Colleen no podía creer que nos hubieran hecho ir al puerto al pedo. Igual aprovechamos el día que si estaba muy ventoso, pero con un lindo sol, y nos fuimos a caminar por las playas de Punta, fuimos hasta los dedos y después de almorzar nos fuimos rumbo a Punta Ballena caminando, sé que está lejos, pero como Agustín y Quilia nos iban a ir a buscar arrancamos caminando. 





Adentro del puerto estaba tranquilo pero afuera del muelle si que estaba picado el mar

No pudimos ir a la isla pero lobos vimos igual 




 
Punto donde termina el Rio de la Plata y comienza el Oceano Atlantico

Faro de Punta del Este

Los populares "Dedos" de Punta del Este

Para disfrutar del agua nos fuimos por la playa, pero había mucho viento y cansaba bastante así que al final volvimos a la calle. Pero en el rato que fuimos por la playa vimos un montón de gente haciendo Kite Surf que son los que andan con unas cometas gigantes y andan haciendo como surf impulsados por las cometas. Esta bueno verlos y tal vez hasta este bueno probar, pero me parece que el agua estaba muy fría para esa actividad, aunque todos estaban con trajes de neopreno por supuesto. Lo otro que vimos en la playa y no fue tan lindo fue un montón de pájaros y pingüinos muertos a la orilla del agua, Colleen nuevamente asombrada de que nadie hiciera nada al respecto para analizar las razones por las cuales tantos animales estaban muertos en las costas y también porque no es lindo salir a caminar en un cementerio de bichos muertos.
Cuando nos cansamos de ver pingüinos muertos y gente haciendo kite surf, y también de caminar en la arena con viento en contra subimos a la rambla y le mandamos un mensaje a Agustín a ver si demoraban mucho. Por suerte no demoraron mucho porque ya estábamos cansados y nos pasaron a buscar enseguida. Fuimos hasta Punta Ballena y paseamos un rato por ahí, bajamos a las grutas, luego pasamos por atrás de Casa Pueblo porque nadie quiso pagar los 300 pesos de la entrada, y recorrimos el barrio de Punta Ballena, yo particularmente nunca había pasado de Casa Pueblo y me sorprendió la cantidad de casas y mansiones que había por ahí con unas vistas preciosas de la costa y unos jardines que no me quiero imaginar el trabajo que dan. El atardecer lo vimos al lado de Casa Pueblo y estuvo genial. Para rematar la tarde nos fuimos a tomar mate y comer bizcochos a lo de Quilia. 





  Agustin y Quilia en "Las Grutas"

 Uno de los jardines de las "casitas" de Punta Ballena

Agustin, Yo y Colleen cerca de Casa Pueblo porque no quisimos pagar para entrar jijij

Quilia, Colleen, Yo y Agustin mirando el atardecer en Punta Ballena

Casa Pueblo 




Atardecer en Punta Ballena

El domingo nos separamos con Colleen, va ella se fue para Canadá porque su abuela cumple 99 años y no se quería perder la fiesta y volverá dentro de 10 días a seguir viajando. Yo me quedé un día más en lo de Susana y Ricky y hasta lo convencí a Ricky de salir a caminar para aprovechar la tarde que estaba hermosa y con un sol radiante. La tarde la pasamos como dos jubilados (porque yo me adapto a todos los estilos de vida) sentados en el porche al sol, conversando de todo y de nada y después cuando refresco nos miramos una película mientras esperábamos a Susana que se había ido a una obra de recaudación de fondos para la asociación de mudos de Maldonado o algo así.
El lunes después de almorzar nos fuimos con Ricky y Susana por la rambla para despedirme de la costa ya que volvía a la ruta y el rumbo fijado era para Lavalleja a Solís de Mataojo y ahora las costas que vea serán de ríos nuevamente porque el océano queda para atrás en este viaje.
Gracias por leer
juan