Ya con Libertad pronta y todos subidos a la camioneta
salimos rumbo a Escuintla para luego ahí ver a donde nos íbamos a ir a pasar la
noche para quedar cerca de la frontera para cruzar temprano a El Salvador.
Con las indicaciones de Eric y Aarón y varias preguntas para
verificar el progreso en menos de 3 horas estábamos en Escuintla y eso con
almuerzo incluido. Pero como nos pareció una ciudad muy grande y sin mucho
encanto al menos por la zona en la que pasamos nosotros, seguimos viaje para
Taxisco en donde íbamos a preguntar para ver si la carretera a Monterrico
estaba linda.
En el camino nos cruzamos con uno en moto que venia bien
cargado y que parecía que estaba haciendo un viaje largo pero no logramos
hablar con el porque siempre íbamos a velocidades distintas, obvio que él iba
mas rápido que yo jijiji. Pero en un punto dado que había un corte en la ruta
por construcción, el llego a nuestro lado y ahí conocimos a Randy, muy
simpático viene desde San Francisco pero planea dar la vuelta en Tierra del
Fuego y luego regresar por Brasil hasta Venezuela en 5 meses, o sea que seguro
que llega mas rápido que yo jijiji. Ahí le comentamos a Randy sobre Monterrico
y quedamos de vernos por ahí.
La ruta a Monterrico estaba buena y como solo eran 20 kms de
desvío de la ruta principal y nos dejaba a una hora del cruce de frontera
decidimos ir, el detalle fue que para llegar a Monterrico por tierra había que
tomar una carretera para ir a la costa desde Escuintla sino en donde habíamos
llegado nosotros había que tomar una lanchita que me quería cobrar $125 Q para
llevar a Libertad cada tramo. Pero como eso era muy caro y nos estábamos por ir
justo nos ofrecieron un garaje por $25 Q por la noche y me arriesgue a dejar a
Libertad ahí solita por $5 Q por persona nos fuimos en otra lanchita hasta
Monterrico.
Monterrico es muy bonito, una playa sobre el pacifico que
tras varios meses sin verlo me recibió muy bien. Pequeño pueblo pero con mucho encanto, dicen que casi no hay
crimen ni robos por ahí pero para comprobar eso habría que quedarse un tiempo.
De primera impresión esta lindo porque esta sobre la playa y la gente no nos
atosigo para vendernos cosas.
Llegamos a un hostal sobre la playa y lo mas divertido fue
que Gorat estaba como loco por saltar al mar, pero como nos dijeron que solo había
internet hasta las 6 que la de recepción si iba y luego los del bar no lo
ponían, solo Annia y Yo nos bañamos porque Gorat se paso en internet
respondiendo emails y no sé que cosas mas. A nosotros nos dio para revisar
nuestras cosas y luego disfrutar un rato del mar pero no mucho porque ya cerca
de las 6 los mosquitos estaban tan bravos que ni aun sumergiéndome entre ola y
ola dejaban de picarme.
Playa de Monterrico, arena negra y muchas olas pero muy bonita
Esa noche salimos a caminar por el pueblo y nos encontramos
con Randy a quien no habíamos visto desde que cruzo el primero con su moto en
las lanchas, a él le dio miedo dejar la moto en el estacionamiento. Y ahí nos
quedamos conversando con el y dos mas que estaban en el restaurant. La charla siguió
en el hostal el Geko que esta muy bonito y en donde el dueño que era uno de los
que estaba hablando con Randy nos trato muy bien.
A la mañana siguiente, salimos temprano de regreso a la
camioneta y Libertad pacientemente nos estaba esperando en donde la dejamos.
Cargamos todo, regalamos los últimos cocos que me quedaban y de ahí salimos
rumbo al cruce de frontera.
La aldea donde quedo la camioneta y desde donde se iban las lanchas que salian para Monterrico
Y casi me arrepiento de haber negado la ayuda cuando a 3 kms
y pico de la frontera veo que inicia la cola de camiones para cruzar. Ahí se me
cayo el alma a los pies, pero como vi que una camioneta de pasajeros se tiro
por el costado de los camiones y el trafico contrario se corría a un lado para
darle paso yo me le pegue atrás, lento pero seguro seguimos avanzando, yo pensando
escusas para cuando me pararan y me hicieran volver al final de la fila jijiji
pero ese momento nunca llego.
Con mucha paciencia y habilidad para pasar entre camiones
que venían y los que estaban parados que no dejaban mucho espacio para pasar,
llegamos a donde había un guardia y otra vez uno que me quería ayudar, me dijo
que el sistema estaba caído en El Salvador y que si yo quería él hablaba con
los oficiales y así me podían ayudar que sino no iba a poder salir ese día, lo
pensé pero me sonó muy a cuento chino porque si no había sistema ni el ni nadie
me podía ayudar así que a este le dije que no tenia dinero y que no le iba a
poder pagar así que no perdiera su tiempo pero me dijo que igual me iba a
ayudar y cuando le insistí que no tenia dinero y el insistió en ayudarme dije
bueno. Menos mal que me ayudo, porque me ahorro bastante tiempo. Me dijo que
sacara unas copias del pasaporte después de haberlo sellado en migraciones,
cosa que nunca se me hubiera ocurrido, también me dijo que tenia que pasar por
aduana a cerrar el permiso de la camioneta porque yo pensé que como un guardia
me lo había sellado ya bastaba y me dijo que le sacara una copia al permiso de
Guatemala para que luego me lo sellaran como terminado para mostrar en El
Salvador y como le hice caso pasamos bastante rápido, tan rápido que el pobre
Randy que había llegado media hora antes que nosotros y que encontré en la
ofician de aduana esperando, tuvo que salir a hacer las copias que yo ya tenia
y termine pasando yo antes que él. Y como en serio no tenia ni un dólar en la
billetera ni un Quetzal tampoco, se me habían terminado los Quetzales el día
anterior, no le puede dar nada a ese hombre porque al final si me ayudaron
mucho sus consejos. Tal vez en otra ocasión le pueda devolver el favor a
alguien.
Tras terminar nuestra parte en Guatemala había que entrar al
El Salvador, cruzando el puente me pidieron el permiso terminado y sellado de
Guatemala, cosa que en la oficina de aduana en Guatemala no me dijeron que iba
a precisar pero que cuando les pedí que me sellaran la copia me la sellaron sin
problemas y me mandaron a la oficina de migración. El Salvador no me sello el
pasaporte así que no se si tengo limite de días o no, pero como en aduanas solo
le dieron a Libertad 60 días para estar de una forma u otra me pusieron un
limite a mi también. El proceso de aduana en El Salvador fue sin problemas pero
bien lento ya que estaban entrenando a uno nuevo y la forma es bien larga, pero
cuando yo me fui de ahí pobre Randy seguía esperando así que nos despedimos y
nosotros pusimos rumbo a La Libertad que es donde vive la familia de Santiago y
William, los dos salvadoreños que trabajaban en el Rancho en Tejas.
Yo y Randy en la oficina de migraciones en El Salvador, cada uno con su medio de transporte
Gracias por leer
Juan
Que grande Juan muy buenos todos los relatos , que lindo pana ¡¡¡¡ te mandamos un abrazo muy grande.
ResponderBorrarDesde el fin del mundo aymi y juancho